3 de febrero de 2013

OPERACIÓN BIKINI 2013 y las Dietas Milagro

El verano a la vuelta de la esquina; momento calor, terracitas, piernas y brazos al aire, lycras y tirantes; playa o piscina, cuerpo al descubierto y trajes de baño... Y el miedo escénico, de nuevo, tal que cada primavera, trepando por nuestra espalda como un escalofrío recordatorio de nuestros kilos de más. Adelgazar se convierte en prioridad: Todas pensando en el gimnasio - solo pensando- y planteándonos hacer la mejor de las Dietas Milagro: Atkins, Dukan, Montignac, de la Zona... Ahhh y como es habitual, aparece la nueva: SEIS SEMANAS PARA SER UN PIBÓN, el libro del británico Venice A. Fulton. Un best seller que llega a las librerías para solucionarnos la vida. 




Sí señoras: El nuevo gurú del adelgazamiento nos explica cómo perder siete kilos de grasa corporal en seis semanas, algo muy dudoso científicamente, porque, como sabe cualquier nutricionista, cuando adelgazas rápido, lo primero que pierdes es justamente lo contrario: Masa muscular. Pero, además, resulta que promete convertirnos, automática y milagrosamente, en un pibón, cosa que, ya de entrada, es mentira; vamos, imposible: Perder los kilos de más es muy recomendable a todos los efectos: Mejora tu salud alejándote del colesterol, la ateroesclerosis, los problemas cardiovasculares, los daños articulares por el peso, la diabetes... Favorece y rejuvenece, como he escrito montones de veces. Y, sí, saca el pibón que hay en ti, pero solo si lo hubiera. Así que no, no te convierte en un pibón por decreto, no nos dejemos engañar. Sin embargo, el astuto escribidor, como muchos otros antes, se está forrando a vender un texto que tampoco es la panacea - ninguna dieta lo es-, y, según se dice, fue  pensado para las celebrities de la televisión de su país. Acabáramos.


Bajar de peso NO te convierte directamente en un pibón



El penúltimo gran fenómeno de las dietas pretende desterrar falsos mitos, y defiende, por ejemplo, que saltarse el desayuno puede ser conveniente, que hay frutas que te impiden perder grasa, que comer a menudo es contraproducente... A ver, caballero, no nos complique usted la vida.

Pero si el verdadero problema no es elegir un régimen: El problema está en nosotras, que somos inconstantes y no acabamos de entender que perder kilos es sacrificado pero no difícil. Lo realmente complicado es mantener el peso ideal. Pero no, no se nos mete en la cabeza que la cuestión NO es hacer dieta cada año, sino reeducarnos y cambiar radicalmente nuestra relación con la comida: Lo que es insano hay que olvidarlo. Bye-bye, au revoir, auf viedersehen, ciao. Adiós.

Debemos pensar y comer de otra manera: Tan sencillo como SUSTITUIR LOS MALOS HÁBITOS ALIMENTICIOS POR LOS BUENOS.

La DIETA SOSTENIBLE, la única que funciona, es la que es permanente, de por vida.




Básicamente consiste en:

- Comer de todo lo que es saludable, pero en pocas cantidades: Sí, también pan, pasta, arroces (lo ideal es que fueran integrales, pero es una fantasía, lo sabemos), guisos...

- Aumentar el consumo de frutas, verduras, hortalizas y legumbres. 

- Utilizar aceite de oliva virgen. Siempre en crudo, y si es posible, también para cocinar. Yo lo hago, aunque las pocas veces que frío algo (no más de un par al mes), uso el de oliva normal.

- Olvidarse de freir: Utilizar en cambio vapor, plancha, horno y microondas.

- Desterrar grasas animales o saturadas, ya sabéis: Carnes rojas, cerdo  - embutidos y fiambres incluidos-, y marranadas varias tipo bollería industrial. Además de favorecer el consabido colesterol, cada vez más se las relaciona con la aparición de algunos tumores.

- Evitar las calorías vacías, esas que se absorben rápidamente y no nos aportan energía, sino que se convierten en grasa, y, además, al ser  metabolizadas de manera fulminante, nos producen un efecto rebote: ese bajón que nos hace inmediatamente necesitar más, y vuelta la borrica al trigo. A todo ésto, el pobre páncreas bombeando insulina a todo trapo. Cualquier tipo de azúcar refinado, especialmente los que están en refrescos, chucherías, pasteles... mejor tomarlo muy eventualmente.

- Darse de vez en cuando algún capricho prohibido para soportar el sacrificio: Chocolate, helado, repostería, bocadillo, tortilla de patata, salsa, cervecita. Sí, no pasa nada por permitirse un homenaje a la semana, para volver al tajo con más fuerza.

- A propósito de caprichos, hay alguno muy saludable: El chocolate negro es rico en catequinas, un tipo de polifenol (antioxidante). Y cuanto más puro en cacao, mejor: Un par de onzas de vez en cuando no constituyen un exceso, y son un potente antiedad.

Si cada año tienes que plantearte la famosa Operación Bikini, es que algo estás haciendo mal. Si tuviste que hacerla el año pasado, el anterior y los demás, y, durante los correspondientes inviernos ganaste esos 4 ó 6 kilos... Plantéate definitivamente que hay que cambiar el chip.

Cuidarse es un ejercicio sostenido, continuado, una carrera de fondo que debe durar tanto como la misma vida. Comer saludable y  equilibradamente puede ser, al principio, un esfuerzo algo costoso


Pero, pasado un tiempo, se convierte en algo normal, una costumbre que ya no pesa. Os lo dice una que tiene tendencia a engordar y que hace mucho que usa una talla 38, cuando he llegado a utilizar en el pasado, y en varias ocasiones, una 44. Pasarme a la Dieta Sostenible es algo que hice muchos años atrás, cambiando mi mentalidad. Y me di cuenta de que lo había conseguido cuando noté que mi carro de la compra había cambiado totalmente de aspecto. Se había vuelto de colores: Rojo, amarillo y verde principalmente, por la cantidad de frutas y verduras que contenía - y contiene-.

Una vez establecida como costumbre, seguir la Dieta Sostenible no cuesta nada. Sencillamente porque ya ni te planteas comerte un bollo de chocolate a media tarde; piensas directamente en el fiambre de pavo con tostada y una fruta. Puedo deciros que con unos simples cambios de hábitos os mantendréis estupendas y os olvidaréis de la cansina Operación Bikini. Vale la pena.

4 comentarios:

  1. Tienes toda la razón, las dietas son una estupidez porque luego se vuelve a coger el peso. Lo que hay que tener es una vida sana.

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    1. Eso es. Y te acostumbras, eh?. Eso sí, de vez en cuando, diesel gustazo ;))

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  2. eres genial, menudos genios, estos de las dietas, y además nosotras encantadas de dejarnos machacar, como si tuvieramos poco con lo que tenemos...
    me encanta tu sentido del humor

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    1. Gracias Maite!. Es que pensamos que la ayuda tiene que venir de fuera, pero somos nosotras las que tenemos que mentalizarnos.

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